Preparar la instalación de una alarma

Los robos van en aumento y usted está pensando en adquirir un sistema de seguridad. Antes de comprarlo, tómese un tiempo para reflexionar. Le aconsejamos que haga un diagnóstico rápido del nivel de seguridad de su casa y empiece a identificar los puntos vulnerables.

Hágase las preguntas adecuadas antes de instalar la alarma

  • ¿La zona donde vives presenta riesgos: inseguridad, vandalismo, robo?
  • ¿El acceso a tu casa está bajo "vigilancia natural": perro guardián, vecinos, comisaría de policía?
  • ¿Su casa está en la planta baja o en el piso de arriba?
  • ¿Cuántas entradas posibles tiene?
  • ¿Están bien iluminados los alrededores de su casa?
  • ¿Suele estar fuera de casa?
  • ¿Cuántos objetos de valor tiene?

Todas estas preguntas le guiarán en su elección: ¿qué detectores? ¿Una sirena? ¿Un sistema de videovigilancia?

Elegir los elementos del sistema de alarma en función de las vulnerabilidades

Un sistema de alarma puede proteger tres zonas distintas: la zona perimetral, la zona del perímetro y el interior de la vivienda.

La zona perimetral

Es la zona que va desde la valla hasta la casa. Es probable que tu casa ya esté equipada con dispositivos de seguridad como vallas, puertas, setos, puertas y teclados. Esta zona puede reforzarse en los siguientes casos: vivienda aislada, de una sola planta, propiedad grande o segunda residencia.
Los medios para reforzar esta zona son las barreras de infrarrojos, los detectores de movimiento externos y las cámaras de vigilancia.

Sin embargo, hay que tener en cuenta ciertas limitaciones. Para instalar detectores exteriores, la casa debe estar completamente vallada y hay que asegurarse de que los detectores elegidos y su ubicación tienen en cuenta la presencia de animales. Los detectores de exterior son mucho más caros que los de interior porque deben ser más robustos, para soportar las condiciones climáticas exteriores, y sofisticados, para evitar falsas alarmas. Su instalación también está sujeta a limitaciones relacionadas con la posible presencia de vegetación: un detector debe tener un campo abierto en su zona de detección.

La zona perimetral

Es el "esqueleto" de la vivienda: muros, ventanas, persianas, puertas, cerraduras, etc. Es la zona que hay que reforzar prioritariamente.

Algunos puntos de acceso a la vivienda son más sensibles. Hay que prestar especial atención a las puertas de servicio, puertas de garaje, puertas de sótano, balcones y verandas. Estas entradas se descuidan con demasiada frecuencia en términos de seguridad. Sin embargo, sus mecanismos de cierre ofrecen poca resistencia a los ladrones, que a veces ni siquiera necesitan entrar en la casa para encontrar tesoros. Los sótanos están llenos de botellas de vino, algunas de ellas muy caras.

Los garajes suelen ser trasteros llenos de objetos fácilmente revendibles (muebles, herramientas, cortacéspedes, motos, bicicletas, etc.). Los ladrones pueden incluso encontrar herramientas para entrar en la casa (escalera, martillo...). Otro acceso en el que no siempre se piensa: el tejado. Algunos ladrones pueden entrar por el tejado simplemente retirando algunas tejas y material aislante.

La mejor forma de proteger el cuerpo de la casa es utilizar detectores de apertura, de impacto y de rotura de cristales. Un consejo práctico: si su balcón es una prolongación del de su vecino, tómese la molestia de bloquear el acceso a él.

En el interior de la casa

A pesar de su vigilancia y de la presencia de detectores de apertura, puede producirse una intrusión. Aún es posible ahuyentar o identificar a un intruso. Para ello, es aconsejable utilizar detectores de movimiento. El número de detectores varía en función del tamaño y la configuración de la casa. Un ático será más fácil de asegurar que una vivienda unifamiliar de varias plantas con varias dependencias.

También es posible equipar la casa con cámaras de vigilancia. Estas cámaras pueden estar conectadas a una alarma IP o simplemente conectadas a una centralita ADSL (independiente de un sistema de alarma). Permiten salir de dudas en caso de activación de una alarma. Basta con conectarlas a un ordenador, tableta o smartphone a través de una app para ver el interior de la casa e incluso, según el sistema, empezar a grabar.

En conclusión, hay muchas formas de protegerse contra los robos. Una protección eficaz es, sobre todo, una cuestión de sentido común. Si tiene alguna pregunta, no dude en ponerse en contacto con nosotros. Nuestros especialistas en seguridad doméstica estarán encantados de ayudarle.